Hoy en el taller me sentí
así. No sé porque, pero fue como a flor de piel.
Quien fue el que te dio el derecho de decidir?
Quien fue el que te dio el derecho de decidir?
Rebelde.
Quienes fueron los que te
hicieron hervir la sangre hasta que se escurrió por tu nariz?
Pena
imperdonable por el nudo desatado que nos quebró a todos de
raíz.
Aborrasco el día en el que decidiste huir.
Que quede
claro que dejaste rasgada la pared, que
nos abriste a la fuerza
los ojos cuando nosotros trabamos de dormir,
el sol ya no arde, ya
no ilumina, ya no alegra.
Perdono al hombre por dejarte parir,
Eres la droga más fuerte, el moretón más
marcado,
la noche más fría, el amanecer harás largo.
Descanse
y déjenos seguir, déjanos traspasar el umbral
que por tu gran
odio se nos ha sido imposible seguir.
Lamento la demasiada
fortaleza que te di,
las herida que me remarcaste por aquel
desliz.
Indiscutidamente a pesar de las heridas
creo que es
imposible NO DEJARSE RENDIR!.
Por que por fin libere mis cadenas
que me mantenían atada a ti.
Dedicado a la violencia, en CONTRA de
ella.
Sucia e inhibidora.


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